El programa que impulsa la Secretaría de Educación Pública
(SEP) incorpora el tema reconociendo que “leer y escribir no son actividades
separadas ni aisladas, la una impacta constantemente a la otra y el dominio de
ambas es fundamental”
Con cada nueva administración, incluso con la llegada de
funcionarios, algunos programas dentro de las entidades gubernamentales sufren
ciertas transformaciones, incluso cambios radicales en sus objetivos o formas
de actuación; en el caso del Programa Nacional de Lectura, para la presente
administración federal se mantendrán algunas de las líneas estratégicas que le
dieron origen, hace más de una década, aunque con algunos agregados.
El más importante sería que al nombre del programa impulsado
por la Secretaría de Educación Pública (SEP) se agrega el tema de la escritura,
como una manera de enriquecer no sólo al programa, sino de “reconocer que leer
y escribir no son actividades separadas ni aisladas: la una impacta
constantemente a la otra y el dominio de ambas es fundamental”, en palabras de
Luis Ignacio Villagordoa, director de Materiales e Informática Educativa de la
Subsecretaría de Educación Básica de la SEP.
Así, el Programa Nacional de Lectura y Escritura propone
diversas acciones para fortalecer “las prácticas de la cultura escrita en la
escuela para que los alumnos sean capaces no sólo de tener un mejor desempeño
escolar, sino también de mantener una actitud abierta al conocimiento y a la
cultura, además de valorar las diferencias étnicas, lingüísticas y culturales de
México y el mundo”.
Entre las líneas de acción del programa se encuentran el
fortalecimiento curricular y el mejoramiento de las prácticas de enseñanza; el
fortalecimiento de bibliotecas y acervos bibliográficos en las escuelas de
educación básica; la formación continua y la actualización de recursos humanos
para la formación de lectores; la generación y difusión de información sobre
conductas lectoras, uso de materiales y libros en la escuela, así como su
incidencia en el aprendizaje; además de la movilización social en favor de la
cultura escrita en la escuela y fuera de ella, para la participación de la
comunidad escolar y de la sociedad.
Es decir, se trata de que niños, jóvenes y adultos sean
usuarios competentes de la lengua, personas que la utilicen de forma plena y
consciente, más allá de la escuela, con propósitos definidos y en los
diferentes ámbitos de la vida: personal, familiar y comunitaria.
Datos duros
El programa parte de la idea de que el acceso de los alumnos
a la lectura y la escritura, a través de materiales y libros durante su
educación básica, que comprende todos los niveles y modalidades educativas,
favorece su formación como individuos libres, responsables y activos, pues ese
es el tiempo justo para desarrollar habilidades de pensamiento, competencias
clave para el aprendizaje y actitudes que los normarán a lo largo de toda su
vida.
Desde la perspectiva de la especialista Elisa Bonilla,
presidenta de la Fundación SM-México, leer y escribir son no sólo el centro del
currículo, del plan de estudios, de lo que uno tiene que aprender de manera
fundamental en la escuela, sino una manera de hacer ciudadanía, “de tener
capacidad de enfrentarse a la vida, tanto funcional como poéticamente”.
Por ello, más allá de contar con datos duros sobre la
incidencia de los esfuerzos de fomento a la lectura en la vida cotidiana,
resulta indispensable sistematizar la información que se ha producido, dijo, y
recordó una encuesta realizada por el INEGI en 2006, en la que uno de los datos
que más le sorprendió fue resultado de una de las preguntas a los niños de
preescolar.
“Si había un adulto que les leyera y el promedio nacional
estaba cerca de 70 por ciento; quería decir que a siete de cada 10 niños les
estaban leyendo en su casa, porque los libros viajaban de la escuela a la casa.
En las escuelas indígenas la respuesta fue de 60 por ciento. Así estaba en
2006, habría que ver cómo está hoy, pero es sorprendente que esos libros
lograran ir del aula a la casa y servir para generar un vínculo afectivo a través
de la lectura.”
Dentro de los esfuerzos de la SEP a través del Programa
Nacional de Lectura y Escritura está un reconocimiento fundamental para
concretar los objetivos: la finalidad es leer y escribir, como un binomio
indisoluble, “no para ser literatos, investigadores o periodistas, sino para
entretenerse y comunicarse, aprender, imaginar, resolver dudas, calificar
ideas, hacer peticiones, quejas, propuestas o denuncias.
“El programa se renueva porque estamos conscientes que leer
y escribir, en medios impresos y electrónicos, son herramientas para la
construcción de la ciudadanía y como práctica cultural que da acceso a todas
las demás actividades humanas”, a decir de Luis Ignacio Villagordoa.
MILENIO CULTURA.
Reportaje especial...
Cumplen metas educativas
Alumnos de la tercera edad hicieron válida la frase “nunca es tarde para estudiar y aprender”, al graduarse como la primera generación del Diplomado del Programa Universidad para los Mayores de la UANL.
La UANL egresó la primera generación del Diplomado Universidad para los Mayores, clase 2011-2013, integrada por 26 graduandos que culminaron una etapa más en su proyecto de vida.
Los universitarios de 55 años y más adquirieron conocimientos e incrementaron habilidades por espacio de cuatro semestres, tendientes a desarrollar sus potencialidades, compartir nuevas actividades sociales y culturales, llevar una vida saludable y obtener herramientas de preparación para un proceso de envejecimiento exitoso.
Por espacio de dos años, cursaron signaturas como salud y estilo de vida, desarrollo humano, computación, historia universal y de México, naturaleza y medio ambiente, los derechos humanos y la cultura de la paz, entre otras.
El Rector Jesús Ancer Rodríguez encabezó la ceremonia de graduación, en el auditorio del Centro de Investigación y Desarrollo en Ciencias de la Salud, ante el júbilo de los egresados, sus familias y maestros.
Ancer Rodríguez dijo que este tipo de acciones cumplen un sueño de la Universidad, que es el de ser una institución educativa influyente, que está siempre pendiente de las necesidades sociales, pero que promueve la cultura académica, los valores humanos y de la sociedad.
“Los cambios sociales son muy importantes y la Universidad tiene que atender esas necesidades; esta forma de visión de la Universidad, socialmente representa un gran reto”, expresó el Rector de la UANL.
A nombre de los graduandos, María Cristina Ramírez Aguilar expresó un mensaje lleno de vivencias y aprendizajes, de aventuras grupales que les permitieron explorar nuevas herramientas y conocimientos sobre el mundo, y prepararse para el camino de la vida.
“Estas actividades nos permitieron tener un amplio panorama para tener una mejor sociedad, más humana y comprensiva y, sobre todo, con mayor identidad”, señaló.
Para César Alfonso Gutiérrez Bencomo, haber tomado el diplomado fue una experiencia maravillosa porque permite a los adultos mayores continuar preparando y actualizándose.
“El seguir estudiando fue por iniciativa propia y un deseo particular de seguir progresando; independientemente de las condiciones de edad, siempre puedes seguir aprendiendo y aportando a la sociedad”, indicó el graduando.
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| Mensaje del Rector Jesús Ancer Rodríguez |
Generación 2011-2013
Rosa Patricia Aguirre Reynoso
Roberto Flores Camargo
María de la Luz Collazo Pérez
Francisco Díaz Martínez
Adalberto Farías Farías
Paulina Gallegos Zárate
María Cristina González Alvarado
Raquel Guerrero Maldonado
Julia Guerrero Vásquez
César Alfonso Gutiérrez Bencomo
Clara Elva Hernández Gaucin
Sara Ledezma Macías
Zenovia López Franco
Olga Martínez Asis
Josué Domingo Medellín Barajas
Rosa Nelly Montemayor Sáenz
Dante Morales Ibarra
María Antonieta Muñoz Cruz
María Angelina Osuna Olivares
Julio Jaime Paz Villarreal
María Cristina Ramírez Aguilar
Rosa Reynoso Puente
Reynaldo Rodríguez Gámez
Ana Elida Salas Ramírez
Francisca Sánchez Guerrero
Patricia Solís Garza
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| Al final de la ceremonia los graduados celebraron aventando el birrete |
El Diplomado es impartido por la Dirección de Educación a Grupos Especiales, ubicada en el Centro de Investigación y Desarrollo en Ciencias de la Salud, Ave. Carlos Canseco s/n, Col. Mitras Centro: Informes en los teléfonos 13405010 y 83294000 extensiones 1715 y 1808, en horario de lunes a viernes de 9:00 a 19:00 horas o accesar a la página www.uanl.mx/unimayores
Por Eduardo Rodríguez Palacios
Fotografía Efraín Aldama Villa
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